Espacios hablados

La crisis sanitaria por la pandemia llevó a Carola Sepúlveda a abordar el cotidiano hogareño –objetos, espacios y rituales– en un rol de contención. En este contexto, la pintora reflexionó acerca del tiempo de lo doméstico y su intimidad, indagando a partir de relatos de personas conocidas y anónimas, convocadas por ella a través de twitter, a describir objetos o experiencias sobre lo que estaban atravesando o experimentando por el confinamiento forzado.

Espacios hablados: de sombras, cotidiano y confinamiento nació de este proceso iniciado en marzo de 2020, en el que Carola fue pintando esos relatos desde el living de su casa, conformando así lo que denomina una constelación de naturalezas muertas.

En esos días de encierro, la proyección de las sombras y los detalles de la contemplación rutinaria se convirtieron en una suerte de cobijo, contención y espesura material para la artista, que en sus procesos busca insistentemente explorar las sutilizas y la fragilidad de la relación entre lo material y lo espiritual, con el propósito de desacelerar el ritmo frenético de la vida para reflexionar sobre lo que muchas veces dejamos de ver y sentir.

"Reflexiona, desde el confinamiento forzado por la pandemia del Covid-19, sobre el tiempo, la cotidianeidad de lo doméstico y la intimidad de la observación. Esto a través de sombras que proyectan la relación metafórica con las plantas como lugar de cuidado y protección; así como la observación de situaciones domésticas narradas por terceros a través de las redes sociales, que son pintadas en pequeños formatos por la artista, como una insistencia en materializar recuerdos y espacios de cobijo", asegura la curadora de la muestra, Andrea Jösh.

El montaje de Espacios hablados: de sombras, cotidiano y confinamiento combina retroproyecciones, óleos sobre tela y diseño sonoro, a través de una instalación de estructuras cilíndricas que contienen una serie de piezas de mediano y pequeño formato en su interior. Desde papel japonés con sombras retroproyectadas, textos a mano alzada sobre muro, óleos sobre tela y una instalación-diseño sonoro.

La artista describe que se propone "un tránsito que parte desde la sombra de la sala hacia otras formas de oscuridad; figuras de sombras hogareñas retroproyectadas sobre una pared circular de papel, que, a la vez, van guiando el recorrido hacia un núcleo denso que envuelve las imágenes íntimas y cálidas del cobijo; pequeños óleos sobre tela con imágenes del cotidiano. El recorrido parte desde una oscuridad monocroma hacia la luz y el color, acompañado por detalles de audio con sonidos domésticos, que refuerzan este ambiente".

Así la muestra invita a pensar y vivenciar, en una propuesta inmersiva, acerca de lo que significa el haber habitado el encierro a través de las memorias corporales y emocionales latentes que anidan en nosotros.

Artista visual: Carola Sepúlveda Fuentes | Curadora: Andrea Jösh | Texto teórico: Sergio Rojas | Productor: Patricio Fernández | Estrategia de RRSS: Soraya Sepúlveda | Encargado de catálogo: Juan Alvear | Proyecto Financiado por el Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes, Convocatoria 2021