Los 47 años del edificio GAM, se conmemoraron con la restauración de la colección de arte, un homenaje al realizador de obras desaparecidas y el anuncio de un archivo digital.
La conmemoración se realizó en conjunto con Ñam Stgo, feria gastronómica que ofreció una degustación de restoranes de Lastarria. La música estuvo a cargo de Pedro Piedra y el coro polifónico UTE.
Hace 47 años se erigió una de las obras más emblemáticas de Santiago y que demoró tan solo 275 días en construirse. El edificio fue la sede de la Tercera Conferencia Mundial de Comercio y Desarrollo de las Naciones Unidas, Unctad III, y tenía en su interior muchas obras de arte funcionales.
Hoy, GAM conmemoró su colección patrimonial que incluye 14 obras rescatadas del edificio original y que están hoy en proceso de restauración: “Este 2019 será el año de la colección en GAM, queremos que se vea más y que nuestros visitantes conozcan su inédita historia. Dedicamos un presupuesto importante para hacer una museografía que la releve y otro tanto para restaurar algunas piezas con deterioro, trabajo que era muy necesario y que nunca se había realizado”, comentó el director ejecutivo, Felipe Mella.
Obras como “Tercer mundo” de Sergio Castillo, “Torso de la Victoria” de Sergio Mallol, “Pez de mimbre” de Manzanito y “Árbol de los sueños” de Marta Colvin, ya fueron este año restauradas, limpiadas y protegidas con materiales especiales. Las jardineras tienen un nuevo sistema de drenaje y vuelven a contar con flores en su interior.
Mella comentó sobre la nueva museografía que acompañará a las obras: “Creo que teníamos una deuda con la historia de la colección de arte de GAM. Estaba un tanto invisible y era muy difícil para el visitante entenderla. Prontamente tendremos placas bilingües con descripción de cada una, de manera que el turista podrá hacer su propio recorrido y conocer su importancia histórica”.
Este fue uno de los anuncios que hizo el director ejecutivo GAM en la celebración de los 47 años del edificio. El programa incluyó un homenaje a Eduardo Guerra, mueblista de 94 años de edad que construyó una decena de obras en 1972 por encargo de los propios artistas. Estos trabajos desaparecieron en dictadura, pero él guardó lo planos y los donó a GAM recientemente.
“Eduardo tiene inteligencia de cabeza y de manos”, comenta Guillermo Núñez, uno de los artistas de la Unctad que confió los planos de su obra a Guerra. “Era pulcro, eficiente, entendía muy rápido nuestras obras. Era uno de los personajes valiosos de la época, trabajaba porque sentía que era una obligación moral hacerlo”, complementa.
Eduardo Guerra construyó además obras de Francisco Brugnoli, Rodolfo Opazo, Mario Toral, Eduardo Vilches, Iván Vial, Santos Chávez, Germán Arestizábal, enmarcó la pintura de Roberto Matta y colaboró con las jardineras de Ricardo Yrarrázaval.
GAM además se comprometió a crear un archivo digital de la arquitectura y arte del edificio para el 2020 y rescatar otras obras de los ’70 para la inauguración del nuevo edificio. El trabajo estará a cargo de Paulina Varas, académica e investigadora del Campus Creativo de la UNAB.
La celebración contó con la colaboración de Ñam Santiago, feria gastronómica que se sumó al aniversario con una olla común para hacer un guiño a los años 70´s. Fue una degustación preparada por restaurantes del barrio Lastarrria como Nolita, Mulato, Chipe Libre, Bocanariz, Bar opera catedral y la ONG Olla Rabani.
La música cerró la celebración con la presencia en vivo del compositor Pedro Piedra y del Coro Polifónico UTE (Universidad Técnica del Estado), agrupación formada en los años 70 por Mario Baeza y que se presentó durante la UNCTAD III. Hoy 18 de sus integrantes originales se reagruparon para seguir cantando.
Además, se abrió al público la instalación sonora "Voces adentro", una hamaca que pende del techo y quien se recueste en ella, podrá escuchar recuerdos de trabajadores que participaron de la construcción del edificio en 1972.
Emilio de la Cerda, Sub Secretario de Patrimonio expresó: “Celebramos el esfuerzo colectivo que implicó la construcción de este edificio y el haber podido llevar adelante una obra tan emblemática para Chile. Celebramos una restitución simbólica de este edificio que se abrió hacia el barrio y a la ciudadanía, que aporta al desarrollo integral de nuestra comunidad y construye valor”.