Miria (Patricia Rivadeneira) irrumpe en Tomás Moro. Ofuscada busca a Tati (Monserrat Estévez) para avisarle que el momento que temían, pero también esperaban –hace más de tres años– llegó. El día siguiente, el 11 de septiembre de 1973, será el golpe de estado.

Así la nueva producción GAM Allende, noche de septiembre, versiona las horas previas al bombardeo a La Moneda donde el propio “compañero presidente”, junto a su círculo más íntimo, debe decidir si renuncia o defiende su gobierno hasta el final.
“Jamás vamos a poder ni siquiera acercarnos a lo que pasó ese día. Es una película de terror, de pena, de caída de los sueños. Esa debacle, física y espiritual, está reflejada aquí”, explica su director, Pablo Casals, particularmente cuidadoso con el acento que desea imprimirle. “Tristeza dura y thriller. A nivel de imagen, sensación y atmósfera, hay momentos de David Lynch y otros de David Cronenberg”, agrega.

Bajo la pluma de Luis Barrales (Altazor 2010, José Nuez Martín 2012), Salvador Allende (Rolo Pulgar), su amante, su hija, un integrante del GAP (Juan Pablo Miranda), su mozo (Matías Jordán) y un líder masón (Mario Lorca), revisan la Unidad Popular por dentro. “Entre los personajes conviven diversos vínculos, tanto emocionales y afectivos como políticos y racionales”, sigue Casals. Pero también se juega con la posibilidad de abandonarlos para ser interpelados por los mismos actores.

Se recrea de esta forma el clima que pudo existir ante el inminente desenlace, se adelantan pulsiones de lo que vendría, y se establecen constantes guiños con el Chile actual. “Los procesos sociales no se detienen ni con crimen, ni con la fuerza”, dice Barrales parafraseando al mandatario y estableciendo la tesis del montaje.

 

Payita y Allende

“Miedo”, fue lo que sintió Rodolfo Pulgar cuando le ofrecieron nuevamente el papel. Aunque le cae como anillo al dedo y ya lo ha desempeñado en dos ocasiones –en el montaje de 1990 de Andrés Pérez y en un radioteatro de 2003– su desconfianza se refería a la forma en que sería abordado. “No soy un imitador. Yo interpreto al Allende que hay en mí”, dice manifestando que aceptó seducido por el texto de Barrales y la seriedad de la compañía Teatro La Pública (Los invasores).


Algo parecido le ocurrió a Patty Rivadeneira con el rol de Payita (Miria), la inconfundible consejera, amante y secretaria del ex gobernante. “Volver a Chile con esta obra tan emblemática, tras 12 años viviendo fuera, es algo muy personal. Lo estoy haciendo con la mayor modestia posible”, aduce mientras se refiere a la sensación que le deja la propuesta. “Es arriesgada y muy interesante. Contemporaniza al personaje, trayendo de vuelta el proceso de la UP y la figura de Allende, pero haciendo el contrapunto con lo que pasa ahora, con este despertar social donde la Alameda una vez más ha sido ocupada”, concluye.


Temporadas Anteriores

Allende, noche de septiembre, se presentó por primera vez en GAM con motivo de la programación de aniversario que conmemora los 40 años del 11 de septiembre de 1973. Luego tuvo una segunda temporada durante marzo de 2014.

Allende, noche de Septiembre

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